¿Qué Cuba es una minita de oro para algunos? Pues claro que sí. Si lo duda tenga en cuenta los abundantes presupuestos gastados por sucesivos gobiernos de los Estados Unidos de Norteamérica a lo largo de más de 50 años y las fortunas creadas por los vividores que han medrado a su costa, bien sean agentes secretos, terroristas, empresarios, disidentes, políticos, periodistas, mercenarios, publicitarios y de otros tantos más oficios.
Solo, como aperitivo, permítame recordarle que en junio pasado Barack Obama (el hawaiano-afrodescendiente de los cambios en EE.UU.), en su campaña para recaudar fondos rumbo a las elecciones de 2012, fue a Miami a participar en sendas cenas, en las que los cubiertos costaron 10 mil y 35 mil dólares, respectivamente. El presidente llevó allí la confirmación de un proyecto para 2012, nada más y nada menos de 62 millones de dólares para actividades subversivas contra Cuba.
Hoy me propongo darles botones de muestra de tales aconteceres a lo largo de esta sufrida historia para nuestro pueblo. Por supuesto será una relación infinitesimal de lo gastado y ganado a costa de las vidas, la sangre y el sufrimiento de los cubanos.
La Operación Mangosta
Fue el plan elaborado para dar fin a la Revolución Cubana tras el fracaso de la invasión por Playa Girón (Operación Pluto). Muchos especialistas afirman que ha sido el mayor programa desestabilizador de los Estados Unidos de Norteamérica en su historia.
El presupuesto asignado a la Operación Mangosta no ha podido ser precisado. Según documentos e investigaciones se puede colegir que se gastaron entre 50 a l00 millones de dólares en el primer año. Voces autorizadas afirman que en realidad el gasto fue mucho mayor, del resto del tiempo de su ejecución no se sabe.
Para dirigir la operación se creó un Grupo Especial Ampliado en el seno del Consejo de Seguridad Nacional. También, subordinada a la CIA y ubicada en la Florida, constituyeron la base JM-WAVE con miles de especialistas bajo su mando. JM-WAVE coordinó el trabajo de los oficiales ubicados en cada uno de los centros CIA en el mundo.
Ese gigantesco complejo agrupó su conspiración contra Cuba en 32 líneas, de carácter económico, político, militar, inteligencia y subversión. Con posterioridad se agregó una tarea de guerra biológica Así nos agredieron en un año con más de 5 mil acciones de sabotaje y actos terroristas, incluidos planes de atentado contra el Comandante en Jefe Fidel Castro y otros dirigentes de la Revolución.
La fortuna de los Más Canosa
Jorge Mas Canosa fue un desconocido dirigente estudiantil del Movimiento Demócrata Cristiano en Santiago de Cuba. Emigrado a EEUU comenzó como repartidor callejero de leche, participó en la invasión por Playa Girón aunque no desembarcó ni combatió. Después avanzó en protagonismo en el seno de las más agresivas organizaciones contrarrevolucionarias y, financiado por la CIA fundó y administró varias empresas terroristas con fachadas de la prestación de servicios.
Aupado por el gobierno de Busch padre (el alcoholico no, el agente de la CIA) creó la Fundación Nacional Cubano-americana (FNCA), la más agresiva y poderosa organización contrarrevolucionaria. La compra de influencias, el apoyo de sucesivos gobiernos de Estados Unidos y los lobbys republicano e israelí, amén de sus fullerías y trampas le llevaron a desarrollar una corporación de telecomunicaciones, MasTec, valorada hoy en 475 millones de dólares. Es bueno saber que el periódico mejicano Excélsior acusó a la FNCA, en su edición del 7 de marzo de 2010, de participar en el contrabando de personas desde México hacia USA, en conexión con el cartel de los Zetas. Por si fuese poco también la mayor organización mafiosa cubana está acusada de narcotraficante y Jorge Mas Canosa, su fundador-jefe, era apodado “El Hombre”.
Un demócrata igual a un republicano… y viceversa
The Havana Note, es una importante publicación digital generada en Washington, que en días pasados publicó una relación de 24 congresistas (demócratas y republicanos) “beneficiados” en cuantía de $ 133 000, con destino a sus campañas políticas de los años 2008 y 2010 por el poderoso grupo US-Cuba Democracy PAC, promotor del bloqueo a Cuba en todos los órdenes. Otros 23 no aparecían en las listas pues un grupo de ellos ya había sido “tocado” con anterioridad y otros tenían decidido su voto por lo que no interesaba gasta dinero en ellos.
Los más favorecidos – todos ellos recibieron 100 mil dólares o más, per cápita, comparen sus cifras con la anterior- fueron los demócratas senador Robert Menéndez (N. Jersey), miembro del Comité de Relaciones Exteriores, el representante Howard Berman (California), expresidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara baja, y el derrotado exrepresentante Ike Skelton, (Misouri), presidente del Comité de las Fuerzas Armadas, y de los republicanos el más “tocado” fue el senador Chuck Grassley.
El presupuesto de 2011
Para el actual año, el Gobierno de EEUU ejecuta 62 millones de dólares para sus programas contra la Revolución cubana. Este presupuesto creció en un 34 % con respecto al de 2010, a pesar de la crisis económica que golpea a EEUU, ya con más de 46 millones de personas bajo la línea de la pobreza y que ha llevado a las calles de sus ciudades a miles de participantes en el movimiento Ocupemos Wall Street (OWS).
Los más beneficiados económicamente son los estandartes mediáticos TV y Radio Martí, con más de la mitad de la asignación gubernamental. Vale reafirmar que ambas emisoras violan todos los protocolos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) en cuanto al respeto de la penetración de ondas radio-electrónicas en fronteras ajenas.
Del resto, el Programa para la democracia en Cuba recibe 20 millones de dólares, a través de la Agencia de Cooperación Internacional de EEUU (USAID), con destino a la llamada “disidencia”. De aquí se nutren organizaciones y empresas contratistas de EEUU que encauzan programas, equipos y fondos a cualquier grupo de Cuba, por pequeño que sea, tan solo con que cumpla con el requisito de oponerse al Gobierno. Aquí están los contratistas del detenido, encausado, condenado y preso en cárceles cubanas, el ciudadano norteamericano Alan Gross. El dinero se hace llegar a cualquier grupúsculo, sin tener en cuenta filosofía o dimensión, por lo que en la relación se listan minúsculas agencias de prensa, partidos “de bolsillo”, blogueros, sectas religiosas, organizaciones de todo tipo incluyendo de gays y de lesbianas. Lo cierto es que desde los años 90, los EEUU han malgastado más de 150 millones en apoyo a la disidencia. Los valores más altos, 45 millones, se alcanzaron en el 2008, cuando cayó enfermo el compañero Fidel.