Por Pedro Hernández Soto
«Estimado amigo. Saludos.
«Soy fiel seguidora de la publicación suya y por ello conozco de su forma inteligente y solidaria.
«El motivo por la cual le escribo es un tanto especial. Mi nombre es Yanet Leiva Piñón, soy paciente que tiene VIH/SIDA. Me siento muy, pero que muy sola, desde que murieron mis padres a causa de esta misma enfermedad la cual heredé desgraciadamente.
«Se que su publicación no tiene secciones de ¨Buscando amigos¨, pero yo le pido y más que eso le suplico que por favor envíe mis datos hacia otras revistas y los publique en Internet en algunos sitios web, para tener muchos amigos en Cuba y en otras partes del mundo. Por favor, ayúdeme, y sin pena alguna publique junto a mis datos mi enfermedad, para que los que hagan amistad conmigo no se desilusionen cuando sepan de mi enfermedad y dejen de escribirme. Yo se que en el mundo hay millones de personas que sin prejuicios entablan amistad sincera con personas como yo.
«Pido a Dios desde ahora, en mis oraciones, que esta carta llegue a sus manos, porque de ser así estoy segura de que usted me ayudará y por eso desde ahora le doy las gracias.
«Sin más con mucho cariño se despide de usted, deseando que Dios le bendiga.
«Yanet Leiva Piñon, Avenida Camilo Cienfuegos No. 912 entre Ahogados y el 1 Oeste. Guantánamo. Código postal 95100. Provincia de Guantánamo.»
La soledad de esta paciente -al parecer joven- es notoria. Sufre tres desgracias en su vida: perder sus padres, padecer VIH/SIDA y el no tener amigos.
Ahora es mucho más rápido y cómodo comunicarse por Internet pero es muy humano establecer correspondencia con ella por vía postal. Por pura solidaridad.
Café Mezclado 