Por aquella fecha, solo conocí en Cienfuegos sobre la muerte de dos jóvenes revolucionarios. Las historias fueron variadas y confusas. Después, cuando me incorporé a la Universidad Central, en 1960, conocí la verdadera e impresionante historia de ambos estudiantes.
Chiqui Gómez Lubián y Julio Pino Machado
Hoy a punto de conmemorarse 55 años de la pérdida, le traigo, amigo lector, una síntesis de sus biografías tomadas del libro Memorias del Instituto de Segunda Enseñanza en Santa Clara, Lucha contra la tiranía batistiana, de los autores general ® Armando Choy Rodríguez y José A. García Bertrand.
Chiqui Gómez Lubián Urioste nació en Santa Clara, el 29 de junio de 1937; al morir contaba con 19 años de edad. Realizó sus estudios primarios en Los Maristas de Santa Clara y Belén de La Habana, y la enseñanza media en el Colegio Martí de Santa Clara y la Progresiva de Cárdenas. Se graduó de Bachiller en el Instituto de Segunda Enseñanza de Santa Clara; los estudios universitarios los inició como estudiante en La Habana. Joven alegre, soñador y con talento artístico, era dirigente del Directorio Revolucionario en la provincia. Chiqui había hecho gala de sus cualidades poéticas. Es emocionante su poema La dama blanca:
La dama blanca besó mi frente
Con beso casto, beso de hermano.
Besa la frente la dama blanca
a los que deben morir temprano.
Extraña ansia siento en mi pecho,
mi mente intenta buscar en vano,
siento en mi pecho la extraña ansia
de los que deben morir temprano.
Algunos han dicho que este poema fue una premonición. Bellos versos que expresan su disposición a entregar la vida, si fuera necesario, porla Patriay por la Revolución, y no refleja un pensamiento pesimista o fatalista.
Julito Pino Machado, con sus 22 años, era un joven más bien serio, estudioso, con un alto sentido de responsabilidad, profundamente convencido de la necesidad de la lucha revolucionaria, valiente y, al mismo tiempo, cariñoso y de grandes sentimientos humanos.
Nacido en Báez, provincia de Las Villas (hoy Villa Clara) el 7 de febrero de 1933, estudió en la escuela primaria pública, y la segunda enseñanza en el Instituto de Santa Clara. De ahí pasó a realizar estudios en la Universidad de La Habana. De carácter afable, estudioso de problemas sociales, leía a los filósofos y sociólogos preocupados por problemas sociales y políticos del momento en que transcurriría su juventud. Fundador del Movimiento 26 de julio en la provincia de Las Villas, desarrolló sus actividades contra el régimen batistiano en Santa Clara y La Habana.
Murió en la ciudad de Santa Clara, el 26 de mayo de 1957, junto a Chiqui, siendo en el momento de su muerte Jefe de Acción y Sabotaje.
Esa fatídica tarde-noche, en el automóvil que utilizaban para realizar acciones revolucionarias, explotó el artefacto que les ocasionó la muerte. El entierro de Julito y chiqui constituyó una masiva manifestación de duelo. En forma espontánea se concentraron a la salida de la funeraria centenares de villaclareños enardecidos y no se produjo allí una confrontación violenta con la policía –que reclamaba que le entierro debía ser sin acompañamiento- gracias a la entereza de la dirigente del Movimiento 26 de Julio en la provincia de Las Villas y madre de Julito, la entrañable Margot Machado…
Café Mezclado 
juan
27/05/2012 at 3:45 PM
Pedro, que seria de nosotros sin la memoria histórica, que bueno que tu llegaste hasta ellos para nosotros…gracias, Juan
hdezsoto
27/05/2012 at 10:20 PM
Fueron dos jóvenes valientes, revolucionarios, de su tiempo. Lo entregaron todo. Este aniversario 55 de su muerte debí recordarlos. Gracias por tu atención Juan. Un abrazo, Pedro
Jorge Delgado
27/05/2012 at 8:38 PM
Pedro, por lo apellidos imagino que Julio era hermano de Quintín, un compañero que dejó hermoso ejemplo aquí en Nicaragua como el primer embajador de Cuba libre, no sé si sabés que aquí se denunció por primera vez los preparativos para la invasión mercenaria en Girón, lo hizo semanas antes de la invasión el entonces presidente de la asociación de estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma (UNAN) en acuerdo con Quintín, que tuvo que salir clandestino hacia Honduras y luego reapareció en Washington como embajador alterno de Cuba ante la OEA, listo para secundar allí al grande Raúl Roa que como sabés se comió vivo a uno inteligente, el acádemico representante gringo que no pudo contrarrestar las maniobras y el verbo de Raúl, por lo que no hizo falta le entrada en combate de Quintín, otra maniobra brillante de Fidel que tenía preparados ambos frentes de combate. Te invito a que indagués y escribás sobre Quintín, sobre todo acerca de su estancia en Nicaragua porque mis mayores en la lucha contaban acerca de su papel en crear aquí una vanguadia revolucionaria, y como enlace del Che para apoyar a la guerrilla nuestra, heredera de Sandino y antecesora de la del 26 de Julio.
Abrazo.
hdezsoto
27/05/2012 at 10:18 PM
Si Jorge, en efecto, fue hermano de Quintín Pino Machado, otro hombre grande en la historia de la Revolución Cubana. Tomo tu propuesta de indagar y escribir sobre Quintín Pino Machado. Gracias por tu atención. Un abrazo, Pedro